El derecho al voto se ha convertido en un derecho de los ciudadanos que es ejercitado por la mayor parte de la población en los múltiples procesos electorales que tienen lugar periódicamente en el mundo. Celebrar elecciones para elegir representantes políticos se ha transformado, gracias a su extensión cuasi generalizada a todos los rincones del planeta, en una costumbre internacional y, por ende, en una norma obligatoria para todos los Estados que forman parte de la actual comunidad internacional. Se vota para elegir representantes tanto en elecciones plenamente democráticas, en elecciones que no se ajustan de forma adecuada a las normas electorales, elecciones no democráticas, elecciones que no son sino una farsa electoral, como incluso en las elecciones que se llevan a cabo en regímenes claramente autocráticos. Esto significa que celebrar elecciones para que los ciudadanos elijan a sus representantes políticos, votar, se ha convertido en un acto reiterado, constante y uniforme, y que además existe una generalizada convicción de que hay que poner urnas a los ciudadanos porque es una norma que obliga a los Estados. En consecuencia, no celebrar elecciones, no permitir que los ciudadanos voten para elegir a sus representantes, constituye una flagrante violación de esta norma internacional.
Palabras clave:
Elecciones – participación política – votar – costumbre internacional – práctica – opinio iuris
Pascual Planchuelo, V. C. (2023). Celebrar elecciones para elegir a los representantes políticos es una costumbre internacional : Holding elections to elect political representatives is an international custom. Revista Tribuna Internacional, 12(23), 85–114. https://doi.org/10.5354/0719-482X.2023.70337